martes, 30 de noviembre de 2010

9.- Las Rabietas

          Desde que nuestr@s hij@s nacen surge una relación de apego entre ell@s y nosotr@s, sus padres y madres, que satisfacemos sus necesidades básicas y todo ésto es fundamental que suceda para que el/la niñ@ desde el primer día de vida se sienta segur@ y querid@. Según van creciendo debemos asegurarnos de que nuestr@s hij@s saben que les queremos mucho y que siempre estaremos con ell@s, pase lo que pase y se comporten como se comporten, para que de esta forma su desarrollo emocional sea el adecuado.

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http://www.elbebe.com/index.php/es/primer-mes/el-apego

          Alrededor del año de vida, aunque más frecuentemente entre los 2 y 4 años, nuestr@s hij@s comienzan a ser cada vez más autónomos e dependientes y quieren hacer cosas que en muchas ocasiones, a causa del peligro que pueden conllevar,  sus padres y madres no les dejamos y por ésto normalmente nuestr@s pequeñ@s se rebelan ante las imposiciones de su entorno y "explotan", se enfadan por la frustración de no poder conseguir lo que desean o de no poder expresarse como quieren. Estas situaciones son muy incómodas para l@s niñ@s y para los padres y madres, sobre todo si se producen en la calle, pero debemos tener mucha paciencia con ell@s ya que se trata de una etapa de sus vidas que deben superar para desarrollar su personalidad, las rabietas forman parte de un fenómeno evolutivo normal y según van madurando las rabietas van desapareciendo, en torno a los 4 años si se tratan adecuadamente. Lo que tenemos que tener claro los padres y madres es que el papel de educar a l@s hij@s es nuestro y somos l@s que debemos marcar las pautas. Querer a nuestr@s hij@s no es lo mismo que maleducarl@s.

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http://poderfriki.blogspot.com/2009/03/diccionario-de-terminos-roleros.html

          Las rabietas suelen durar unos minutos y consisten generalmente en lloros, gritos, pataleos, puñetazos e incluso, en casos más graves, en autolesiones o en hacer daño a l@s que tiene a su alrededor, dependiendo todo ésto de cada niñ@. Es fundamental que como padres y madres les ayudemos y reaccionemos con paciencia, con calma y que por ningún motivo recurramos a los gritos o a la violencia ya que somos el modelo a imitar para nuestr@s peques y nunca debemos hacerles daño ni enseñarles a maltratar. En casos de problemas de comportamiento graves siempre podemos recurrir a especialistas.

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http://lapaginadejazmin.blogspot.com/2010/05/rabietas.html



          Tras una rabieta debemos hacerle saber a nuestr@ hij@ que ese es un comportamiento inmaduro e inadecuado y que existen otras formas de expresarse y de pedir las cosas, pues si lo hacemos mientras dura el berrinche no hará caso de nada de lo que le digamos y lo mejor en ese momento es ignorarl@. Lo más importante es no ceder y mantenernos firmes si nuestr@ hij@ se enfada para llamar nuestra atención, para que le demos algo, para no hacer algo que debe hacer, ... si cedemos sabrá que mediante sus enfados puede conseguir lo que quiere. También es muy importante que reforcemos a los niñ@s elogiándoles cuando se portan bien, respetándoles, escuchándoles, y no mintiéndoles, además de que los padres y madres debemos estar deacuerdo entre sí en lo que respecta a la educación de l@s hij@s. Es muy adecuado que expliquemos a nuestr@s pequeñ@s por que no pueden hacer lo que desean y que les pongamos unos límites y normas, aunque pocas y coherentes, que conozcan de forma clara, al tiempo que deben saber también de la existencia de consecuencias por no obedecer dichas normas.
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http://hastalalunaidayvuelta.blogspot.com/2008/10/sobre-rabietas-y-autoagresiones.html

          Hay que tener en cuenta que en muchas ocasiones las rabietas ocurren por que nuestr@ hij@ está cansad@, hambrient@, nervios@ o incluso ese mal comportamiento nos puede dar una pista sobre su salud y lo ideal en estos casos es que nos pongamos en su lugar, que le cojamos en brazos, que le calmemos y si está cansad@ que le dejemos dormir, si tiene hambre que le demos algo de comer o si tenemos algún indicio de que pueda estar enferm@ observarle y llevarle al pediatra si fuese necesario.

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http://www.periodistadigital.com/opinion/cartas-al-director/2009/09/12/hijos-de-mala-madre.shtml

         En varias ocasiones ya se ha comentado que cada niñ@ es especial, únic@ y teniendo en cuenta ésto os propongo una serie de consejos que pueden sernos útiles a los padres y a las madres para manejar adecuadamente las situaciones tan incómodas que se producen a raíz de las rabietas de l@s hij@s:

  • Es fundamental que los padres y las madres mantengamos una actitud tranquila, en calma, controlando la situación en todo momento y así, probablemente, llegará el día en que nuestr@ pequeñ@ seguirá nuestro ejemplo. Debemos ser pacientes e incluso echar mano de nuestro sentido del humor, sin reírnos ante el/la niñ@, y tratarl@s como nos gustaría ser tratad@s si nos regañasen a nosotr@s, sin ponerles "nombretes", ni gritos, ni insultos, ni faltas de respeto.
  • Cuando empiece la rabieta, si su comportamiento no es destructivo, debemos ignorar al/la niñ@, sin castigarle para que no tenga otra rabieta, ya que por mucho que le digamos no nos va a escuchar y nunca  debemos responder con otra rabieta, recuerda que los padres y madres somos su ejemplo a imitar. Cuando se le pase el berrinche debemos ser amistos@s con ell@s y hablar sobre lo sucedido aunque sin ceder a sus demandas. Aunque si la rabieta se produce por frustración, cansancio, ... lo que necesita nuestr@ hij@ es nuestro apoyo, comprensión y cariño.
  • Debemos darle al/la pequeñ@ tiempo y espacio para que recupere el control, aunque sin alejarnos demasiado y manteniéndonos firmes. 
  • Podemos darle a elegir para que realice entre algunas actividades adecuadas para su edad y de esta forma se sentirá útil (puede ser incluso, entre otras, que elija alguna prenda de ropa que ponerse).
  • Hay que darle mucho cariño y afecto tras la rabieta aunque sin premiarl@ para que no se confunda. Al tiempo que debemos elogiar sus esfuerzos y las cosas que hace bien, para reforzar sus conductas positivas, así irán aprendiendo a pedir las cosas de forma adecuada y a comportarse en algunas situaciones difíciles.
  • Si la conducta no cambia podemos llevarl@ a su habitación, por ejemplo, y mantenerl@ allí alrededor de un minuto por año de edad, pero siempre cerca de los padres y madres.
  • Es muy importante que como padres y madres aprendamos a evitar las rabietas de nuestr@s hij@s quitando de su alcance objetos que no queremos que cojan o juguetes que no saben manejar ya que puede producir un enfado, evitando que jueguen a juegos que l@s alteran demasiado dirigiéndoles la atención hacia otra actividad o juguete, adelantándoles lo que deben hacer con unos 5 minutos de antelación, sobre todo si sabemos que eso que deben les produce enfado (ir a la cama, ...), intentando identificar si nuestr@s hij@s pueden tener hambre, sueño, ... ya que estas situaciones suelen acabar en una pataleta si no se evitan.
  • Debemos hacer entender a nuestr@s hij@s que cuando decimos "no" es "no" y no "tal vez", al tiempo que como se ha dicho en lineas anteriores, las normas y los límites que pongamos a ést@s debemos explicárselos con un lenguaje que entiendan hasta que les queden claros, al igual que las consecuencias de las malas conductas. Aunque también es cierto que cuanto menos digamos a nuestr@s peques que "no" es mucho, de aquí la importancia, como ya se ha dicho, de que los padres y madres aprendamos a evitar las rabietas de l@s hij@s.
  • Si durante sus rabietas nuestr@s hij@s tienen un comportamiento agresivo, destructivo, se autolesionan o hacen daño a l@s demás l ideal es sujetarl@s con firmeza, abrazarl@s y decirles que sabemos que están enfadad@s, hasta que notemos que empiezan a relajarse. Es muy importante que si tenemos dudas sobre el comportamiento de nuestr@s pequeñ@s o si las rabietas graves no desaparecen con la edad consultemos al/la pediatra o a otr@ especialista que pueda ayudarnos (psicólog@, pedagog@, ...).

Fuentes consultadas: